15 marzo 2007

Ciao bambina

Podría haber huido. Era tan fácil. Pero yo nunca me doy la vuelta en estos casos. (Y no es virtud, sino más bien defecto, o vicio)

Ahora hace tiempo que estoy frente a ti y tú sin enterarte, aguantando este viento endemoniado que amenaza con convertirme en estatua de sal.

Todo fue tuyo, las alas de los pájaros que conozco, las hojas gastadas de mis libros, la bruma tierna de los amaneceres.

Hoy te saludan las banderas azules que marcan los límites de mi pequeño reino.

Bye, bye, baby. No me eches mucho de menos.

3 Comments:

At 17/3/07 2:32 p. m., Blogger S said...

Saber cuándo decir adiós es una virtud poco frecuente...

 
At 18/3/07 12:08 a. m., Blogger Silvana Bocage said...

Y además ponerlo en palabras, bien, muy bien. Tiempo sin leerte, a ti y a todos. Me alegra pasar por aqui. Un abrazo

 
At 18/3/07 11:44 p. m., Blogger aseklu said...

S, addio en italiano significa un adiós para siempre, definitivo. En cualquier adiós, aunque no sea total, siempre hay algo que no vuelve. Y aunque nos duela es bueno que sea así.

Sil, si que estás muy calladita estos últimos tiempos. Me alegra "verte".

Baci.

 

Publicar un comentario

<< Home

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

  • ecoestadistica.com